Hoy
la camioneta tuvo su merecido medio día de descanso por que el viaje lo hicimos
embarcados en “La Tehuelche”, una moderna barcaza que transporta, pasajeros y
carga y que cumple dos salidas diarias a la población de Chile Chico. El día se
presentó nublado pero sin viento, de manera tal que la navegación resultó muy
tranquila. Llegamos al mediodía, y luego de dar unas vueltas por la ciudad, la que cuenta con 4.500 habitantes, no dirigimos
por un camino secundario, de ripio, por supuesto, a la Reserva Nacional Laguna
Jeinemeni distante 50 kilómetros .
El camino recorre un paisaje plenamente patagónico, es decir carente de
vegetación, y bordeado de cerros, algunos muy coloridos, había tramos en que ascendía
bruscamente, y en otros que descendía de la misma forma, en partes, iba
bordeando un río torrentoso, cuyas aguas, de color celeste, eran muy claras. Producto
de una lluvia reciente se habían formado
algunos barriales, los que afortunadamente, pudimos sortear sin mayores dificultades En un determinado momento pudimos avistar un
zorro que se encontraba a la orilla del camino que nos concedió sólo algunos
segundos como para obtener una fotografía, antes de internarse en un
bosquecillo. Al llegar exactamente al acceso a la reserva, nos dimos con que
había que vadear un río con bastante caudal, y que corría con mucha velocidad.
Nos adentramos en el curso de agua algunos metros, pero observamos que el
desnivel continuaba y que el nivel del agua ya superaba el punto medio de las
ruedas Ante esta situación recordamos aquello de que “… soldado que huye sirve
para otra guerra” y retrocedimos para estacionarnos en la orilla a la espera de
que pasara otro vehículo para poder apreciar la verdadera profundidad y decidir
en consecuencia, mientras, aprovechamos la detención para almorzar disfrutando
del paisaje. A todo esto transcurrió más de media hora, y, como en ese lapso no hubo ninguna novedad,
dimos la media vuelta e iniciamos el regreso a la ciudad. Finalmente resultó la
decisión más prudente por que en la hora y cuarto que insumió el viaje de
vuelta no nos cruzamos con ningún vehículo. Insumimos el resto de la tarde
visitando un mirador que hay en el extremo del puerto desde el cual se tiene
una vista panorámica de la ciudad y el lago, luego caminamos por las tranquilas
calles y degustamos un rico café expreso, cosa que no hacíamos desde hace
varios días.
A Bordo de "La Tehuelche"
Lago Gral. Carreras
Chile Chico
Chile Chico - La Evidencia de los Vientos
Chile Chico - Puerto
Chile Chico
Camino a la Reserva Jeinemeni
Camino a la Reserva Jeinemeni
Camino a la Reserva Jeinemeni
Camino a la Reserva Jeinemeni - Casi Entramos
Camino a la Reserva Jeinemeni - Casi Entramos
Camino a la Reserva Jeinemeni - Casi Entramos
Camino a la Reserva Jeinemeni - Hay Cada Nombres ......
Chile Chico
Chile Chico - Plaza del Viento
HOLI
ResponderEliminarJAJA YO LO HUBIERA MANDADO AL GORDITO HACER LA INSPECIÓN DEL CRUCE DE AGUA CAMINANDO ANTES DE PASAR EN EL AUTO (YO ME CANTO DE MIEDO.)
BUENO EN CUANTO A LAS FOTOGRAFIAS HAN DISMINUIDO EL TAMAÑO DE LOS ANIMALES, POR ALLA OSOS Y AQUI UN PEQUEÑO ZORRO. JA JA TODO VALE
BESOS BETTY