Nuestro Viaje al Norte

14/03/2013 - 207º DIA – PUERTO NATALES – PARQUE NACIONAL TORRES DEL PAINE 196 KMS.

Debido al cierre de la ruta que lleva por el camino más corto al Parque, tomamos otra, que si bien es más larga, tiene menos tramo de ripio. Esta carretera pasa por Cerro Castillo, una pequeña población fronteriza ubicada a 52 kms. de Puerto Natales, luego torna hacia el oeste ascendiendo lentamente hasta llegar al mirador del Lago Sarmiento lugar desde donde se tiene una primera vista, a lo lejos, de las torres. Sobre las torres es bueno saber que éstas forman parte de la Cordillera ó Macizo Paine y que sus tres torres características son de basalto esculpido por los hielos. Las tres torres llevan los nombres de: Paine Grande (3000 mts.), Torre Central (2750 mts.), y Torre Sur (2550 mts.) Continuamos, y ya ingresados en el parque, a la vuelta del camino nos sorprende La Laguna Amarga, cuyo nombre obedece al elevado nivel alcalino que tienen sus aguas que le da un fuerte sabor amargo. Como el día estaba soleado y sin viento, las aguas reflejaban las montañas circundantes, obteniéndose una vista que es como duplicando del paisaje, lamentablemente, como siempre lo decimos, las fotografías no pueden captar toda la belleza que éstos ofrecen, son sólo un sucedáneo que ayudan a mostrar el paisaje pero que no lo consiguen. Desde aquí nos dirigimos a la Laguna Azul, otro hermoso espejo de aguas de un subido tono azul que contrasta con las nieves eternas que tienen los cerros. Esta es una zona de mucho viento, aunque nosotros con la suerte que nos acompaña, no lo padecimos, pero se observa el efecto que causa, sobre todo en la vegetación que crece de manera inclinada. Continuando este bello raid nos encontramos con el impresionante Lago Nordenskjöld, el que al igual que los anteriores, ofrece magnificas vistas de las Torres. Este lago es el lugar de nacimiento del Río Paine, el que kilómetros más adelante protagoniza unos imponentes saltos entre los que sobresale el Salto Grande que se puede observar plenamente desde sus orillas, más adelante, sus aguas se vuelcan en el Lago Peohé, y a la salida de este, esta luego de atravesar otros saltos de menor altura, Salto Chico, sigue su curso hasta desembocar en el Lago Toro. La oferta de alojamiento en el parque es escasa y muy cara, y la idea de volver a Puerto Natales y regresar al día siguiente no es buena, tanto por la distancia a recorrer, como por el estado de los caminos que son de duro ripio, entonces, aprovechando la racha de buen tiempo que nos acompaña optamos por armar campamento en un camping organizado ubicado en un lugar de ensueño a orillas del Lago Peohé con vista a las torres. Realmente se trata de cambiar la comodidad y confort de un hotel o una cabaña por disfrutar de unos días de vida al aire libre integrados a un paisaje sobrecogedor, algo así como menos comodidad, por más belleza.

Transitando por estos caminos, el viajero se ve abrumado por la cantidad de indescriptibles paisajes que se le van presentando sin solución de continuidad, y resulta imposible absorber tanta belleza junta. No se pueden describir estos lugares, y menos aún retenerlos en la memoria, es un alud que nos cubre, del que intentamos salir cámara en mano tratando de capturar lo imposible. Por ello, lo mejor es dejar que las fotos hablen.